jueves, 1 de octubre de 2009

...falta menos para azul



"...se alejaría mucho de la costa y dejó atrás el olor a tierra y entró remando en el limpio olor matinal del océano. Vio la fosforescencia de los sargazos en el agua mientras remaba sobre aquella parte del océano que los pescadores llaman «el gran hoyo» porque se producía una súbita hondonada de setecientas brazas, donde se congregaba toda suerte de peces debido al remolino que hacía la corriente contra las escabrosas paredes del lecho del océano"."...se alejaría mucho de la costa y dejó atrás el olor a tierra y entró remando en el limpio olor matinal del océano. Vio la fosforescencia de los sargazos en el agua mientras remaba sobre aquella parte del océano que los pescadores llaman «el gran hoyo» porque se producía una súbita ondonada de setecientas brazas, donde se congregaba toda suerte de peces debido al remolino que hacía la corriente contra las escabrosas paredes del lecho del océano".
"El viejo y el mar" E. Hemingway

2 comentarios:

Mariana_Maia dijo...

me gusta todo lo que tiene que ver con el mar... lindo fragmento :)


p.d. todo no... no me gusta el olor del puerto jeje!

Unknown dijo...

"Cuando el viento soplaba del este, el hedor se extendía a través del puerto, procedente de la fábrica tiburonera; pero hoy no se notaba más que un débil tufo porque el viento había vuelto al norte y luego había dejado de soplar. Era agradable estar allí, al sol, en La Terraza"

Supongo para los pescadores ha de ser un agradable olor y una sensación d tarea realizada, de victoria después de un largo día de trabajo