¿Qué provecho recibe el hombre de todo el trabajo con que se afana bajo el sol? Una generación va y otra generación viene, mas la tierra permanece para siempre.
Porque en la mucha sabiduría hay mucha angustia, y quien aumenta el conocimiento, aumenta el dolor.
Porque no hay memoria duradera ni del sabio ni del necio, ya que todos serán olvidados en los días venideros. ¡Cómo mueren tanto el sabio como el necio!
Y aborrecí la vida, porque me era penosa la obra que se hace bajo el sol, pues todo es vanidad y correr tras el viento. Asimismo aborrecí todo el fruto de mi trabajo con que me había afanado bajo el sol, el cual tendré que dejar al hombre que vendrá después de mí. Pues, ¿qué recibe el hombre de todo su trabajo y del esfuerzo de su corazón con que se afana bajo el sol? Porque durante todos sus días su tarea es dolorosa y penosa; ni aun de noche descansa su corazón. También esto es vanidad.
Es salomón quien escribe el libro de eclesiastés. El rey de una gran nación quien parecía tenerlo todo abre su corazón para decir:
Todo lo hice
Todo lo tuve
Todo lo supe (recordemos que fue la persona mas sabia de su época)
Todo lo experimenté y de nada me privé
pero aún así me siento tremendamente vacío, siento que nada de esto tiene sentido.
Esta es la sensación que hay en el corazón de todo hombre y mujer que habiten la tierra. El vacío en el corazón no es de unos pocos, todos hemos experimentado esa sensación de insatisfacción. Nada material, físico, terrenal puede llenarlo y lo comprobamos día tras día tratando una y otra vez de alimentarlo con diversas cosas.
La felicidad es de corta duración, en un momento nos sentimos inundados de un gozo que parece nunca va a acabar y de pronto como la caída abrupta por un tobogán dejamos de tener esa sensación y pasamos a sentirnos solos, tristes, desdichados.
¿Cuál es el origen de la insatisfacción en el hombre?
En el pricipio de los tiempos Dios creó al hombre y a la mujer a su imagen y semejanza para que vivieran en el jardín del Edén. Tenían todos los beneficios y privilegios que se pudieran imaginar: comida, casa, una relación permanente con Dios. La única consigna para seguir disfrutando de esto era que no debían comer de un frutito que había en el jardin.
El comer del fruto no solo representa la desobediencia del ser humano, sino ese sentimiento de insatisfacción con quien era y lo que podía hacer o ser. Sintieron que necesitaban mas, fueron incapaces de ver a Dios como ser superior que podía llenarlo todo y desobedieron.
Las consecuencias ahora iban a ser fatales para toda la humanidad, por lo que Adan y eva hicieron se extendió la maldición a todos. Perdimos los privilegios delante de Dios. Todos los que vinimos después de ellos estamos lejos de su presencia de ser aceptados.
¿Qué es la insatisfacción?
Es ese deseo de querer encontrar algo que de sentido a nuestras vidas, de encontrar la cosa, persona, lugar, ocupación que tenga la capacidad de hacernos sentir felices. Intentamos continuamente de distraer nuestras cabezas con lo cotidiano para aunque sea por unos instantes escaparnos de esa realidad.
Yo puedo entender que algunos de los que estén leyendo esto quizá digan: esta piba está loca, ¿de qué me habla? ¿de Dios?, yo no creo en esas cosas.
Quiero que hagan una pausa en sus pensamientos cotidianos(y sobre mi :)) y reflexionen si realmente tienen felicidad genuina y satisfacción duradera en su vida, piensen en lo que sienten cuando llega la noche y se acuestan en la cama sin poder dormir, cómo se sienten cuando están solos y no hay ruido alrededor.
Quizá algunos puedan llegar al punto de encontrar que no hay nada, que siempre creyeron tenerlo "todo": profesión, estudios, trabajo, una familia o un proyecto de una, auto, casa, el último celular de alguna compañía conocida que tiene la capacidad de volar y prepararte el desayuno, pero descubren que ahí, en el fondo, hay una mancha negra que a veces tiene la cararotez de aparecer y que se llama insatisfacción.
(Sigue en la nota II)
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